La Gran Depresión redujo su camino a través de Toronto durante el período comprendido entre 1929 y 1939. Una larga crisis de desempleo década que vio oleaje desempleo Toronto el 30% mientras que los salarios cayeron. A excepción de Swansea y Forest Hill, los gobiernos municipales en el área metropolitana de Toronto fueron a la quiebra. Si usted era un graduado de la universidad de administración de negocios o un trabajador de planta con no más de un ocho de educación primaria, el pellizco fue sentida por todos.
Los cambios en la Vivienda
Si bien la situación se puso tan mal que algunas personas terminaron sin hogar, los cambios más sutiles llegaron en forma de casas más pequeñas cada vez más popular, más lejos del centro de la ciudad, y un movimiento de modo que el 30% de la población estaría viviendo en apartamentos. La construcción se redujo en el período, debido a la falta de inversión, excepto en que un área de viviendas residenciales. Aunque no era el dinero a los barrios pobres de reforma, hubo una inversión municipal de renovación de casas pobres de Toronto durante este período.
Los cambios en la vida familiar y la política
La presión económica es, sin duda, estresante para todos los involucrados, y las anécdotas de la época hablan de la violencia doméstica y los argumentos alimentada por la falta de oportunidades. Mientras tanto, los matrimonios disminuyeron ya que la gente simplemente no podía permitirse el lujo de formar una familia. Mientras tanto, los movimientos políticos socialistas obtuvieron más popular. Este fue también el lugar de nacimiento de muchos programas sociales, Toronto ganó una Oficina de Empleo Cívico y Oficina Central de Socorro de desempleo durante este período.
Los cambios en Trabajo
No era un buen momento para ser un trabajador no calificado. La producción industrial se desplomó, y trabajadores de la fábrica fueron uno de los sectores más afectados. Mientras tanto, los funcionarios llegaron a ser demasiado caro para el empleo en general por la clase media, pero al mismo tiempo, los nuevos puestos de trabajo se abrieron para las mujeres. Esto fue principalmente confinada a las esferas tradicionales, pero el papel de la secretaria se hizo más establecido, con las mujeres a tomar clases en una carrera o universidad Administración de Empresas. En muchos casos, su salario sería luego ir a ayudar a sus familias. Al igual que en cualquier momento de la lucha económica, las personas que tienen problemas para encontrar trabajo miraron a la educación, pero sólo si se lo podía permitir.
La Gran Depresión terminó con la Segunda Guerra Mundial, pero el legado de la depresión sigue vivo, en la arquitectura de la época, en las historias de la familia y en los programas sociales que hoy disfrutamos. Hoy en día, los estudiantes estudian los orígenes económicos de la historia y de contabilidad cursos en Toronto. Aprenden sobre colapsos del mercado de valores y los problemas de erosión del suelo, así como las diferentes estrategias que podrían evitar una segunda crisis. Y el paisaje de Toronto ha cambiado. Se ha convertido en el líder económico de Canadá. A pesar de la situación financiera global no es algo seguro, e incluso la economía provincial puede ser preocupante, a veces, por lo menos Toronto resistido el primer desastre y mantuvo muchas de las medidas que la hicieron sobrevivir.
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